Reportaje de la cadena Huesca Televisión en el informativo del día 20-10-2009

Los pisos para discapacitados no tienen acceso a su terraza

http://www.radiohuesca.com,  20-10-2009

Qué haría si viviera en un piso y no pudiera salir a la terraza de su casa. Una oscense que vive en silla de ruedas no se resigna a no poder salir a las cinco terrazas que tiene su casa de protección oficial calificada como adaptada para minusválidos. Su queja ha llegado hasta el gobierno de Aragón, pero la respuesta es que la Ley dice que la terraza no es parte de la vivienda, y por lo tanto no están obligados a suprimir esa barrera arquitectónica.

Los pisos de Protección Oficial tienen un porcentaje reservado para personas discapacitadas. Teresa Moyano consiguió unos de estos pisos, pero asegura que si hubiera sabido los obstáculos no lo habría comprado, pero que no le dieron opción a ver el piso antes de hacerlo.

Cuando le entregaron el piso hubo algunas deficiencias que se subsanaron, como el ancho de las puertas o después de varias quejas el lavabo, pero la terraza tiene un escalón insalvable con silla de ruedas, y Teresa no quiere rendirse porque lo considera injusto.

Tras la contestación de que la terraza es zona privativa, Teresa no se cansa de papeleos, y ha mandado una carta al presidente del Gobierno de Aragón para pedir que esta Ley se modifique.

Qué haría si viviera en un piso y no pudiera salir a la terraza de su casa. Una oscense que vive en silla de ruedas no se resigna a no poder salir a las cinco terrazas que tiene su casa de protección oficial calificada como adaptada para minusválidos. Su queja ha llegado hasta el gobierno de Aragón, pero la respuesta es que la Ley dice que la terraza no es parte de la vivienda, y por lo tanto no están obligados a suprimir esa barrera arquitectónica.

Los pisos de Protección Oficial tienen un porcentaje reservado para personas discapacitadas. Teresa Moyano consiguió unos de estos pisos, pero asegura que si hubiera sabido los obstáculos no lo habría comprado, pero que no le dieron opción a ver el piso antes de hacerlo.

Cuando le entregaron el piso hubo algunas deficiencias que se subsanaron, como el ancho de las puertas o después de varias quejas el lavabo, pero la terraza tiene un escalón insalvable con silla de ruedas, y Teresa no quiere rendirse porque lo considera injusto.

Tras la contestación de que la terraza es zona privativa, Teresa no se cansa de papeleos, y ha mandado una carta al presidente del Gobierno de Aragón para pedir que esta Ley se modifique.

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Reportaje de Antena Aragón en el programa Aragón Abierto

No puedo salir a mi terraza

El Periódico de Aragón, 07-09-2009

Teresa Moyano denuncia que su vivienda protegida, adaptada para discapacitados, tiene un bordillo de más de 20 centímetros que la promotora no quiere eliminar.

Ni a regar las plantas, ni a cenar al aire libre ni a tomar el sol. Teresa Moyano tiene una terraza, pero no puede acceder a ella. Una minusvalía le obliga a desplazarse en silla de ruedas y en su vivienda protegida, teóricamente adaptada para discapacitados, hay un bordillo de más de 20 centímetros entre el interior del piso y el exterior. Es una separación insalvable a la que, según denuncia, la promotora no pone solución.

«Estamos luchando contra esto, pero no hay manera», lamenta Moyano. Se ha dirigido ya a la propia empresa, a la consejería de Obras Públicas, Urbanismo y Transportes y al Justicia de Aragón, sin éxito. Ahora, asegura que va a escribir al propio presidente del Gobierno de Aragón para exponerle su caso. «Forcusa, la constructora, gestionó los permisos de obra a mi nombre y dijo que yo pagaría los materiales y ellos la albañilería», denuncia la afectada, que acusa a la compañía de no querer hacerse cargo de los trabajos. Después trasladaron su caso al Justicia, que se dirigió a Urbanismo y Obras Públicas.

«El problema es que las terrazas privativas de estas viviendas se consideran superficie exterior y no están obligadas a estar adaptadas», explica. Desde el propio departamento confirman esta circunstancia y explican que, como mucho, se podría imponer una sanción leve a la promotora.

Teresa Moyano no es la única que se encuentra en estas circunstancias. De hecho, el Justicia de Aragón ha recibido quejas similares sobre otras promociones. Moyano explica que en el polígono 39, donde se encuentra su vivienda, hay al menos otros dos residentes en la misma situación. Uno de ellos ha optado por llevar a cabo las obras él mismo. Pero ella no quiere llegar a ese extremo. Cobra una pensión que no llega a los 600 euros y depende de la ayuda de su hermana para pagar su piso y llegar a fin de mes. «Creo que tengo derecho a que me lo arreglen –manifiesta–. A mí no me dejaron ver el piso hasta firmar las escrituras ni nadie me preguntó si quería una terraza, pero si la hicieron, debería estar adaptada». Ya hace más de un año que recibió su vivienda, y no quiere resignarse a no poder utilizar ese espacio.

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Encerrada en su propia casa

Diario del AltoAragón,  28-07-2009

Teresa Moyano, minusválida, ha recurrido al Justicia para exigir una casa en condiciones

Foto: Diario del AltoAragón

HUESCA.- Cuando Teresa Moyano accedió por primera vez al portal de su casa comenzaron los problemas, porque ni los accesos ni la propia vivienda estaban completamente adaptados, a pesar de que cuando le asignaron la suya, de Protección Oficial, tenía que reunir unos requisitos para facilitar su movimiento de forma independiente. El peor de esos obstáculos está en el bordillo de más de 20 centímetros de altura para acceder a la terraza, lo que la mantiene encerrada en su propia casa y le impide salir en caso de emergencia, ya que por su minusvalía está obligada a llevar una silla de ruedas.

Por ese motivo, ella y su hermana, María Josefa, han pedido explicaciones en la consejería de Obras Públicas, Urbanismo y Transportes del Gobierno aragonés y al no tenerlas llegaron hasta el Justicia de Aragón, que hace unos días les comunicó que no podía darles respuesta y, de nuevo, la semana pasada volvieron a consultar en la delegación oscense del departamento. Al parecer, la normativa para la adaptación de estas viviendas no incluye el espacio exterior, ya que no se considera superficie útil de la vivienda. «¿Para que me han puesto las terrazas, si no puedo salir de aquí por ningún lado Para eso que me hubieran puesto unas ventanas. Quiero una terraza para salir, no para estar encerrada», lamenta Teresa.

Esta respuesta llega más de un año después de que recibiera su vivienda, situada en la calle Julio Alejandro, en el polígono 29. Antes de ello, solicitaron a la empresa constructora, Forcusa, poder acceder a la obra para comprobar si se estaban haciendo correctamente las adaptaciones. Afirman que no pudieron y en el momento que firmaron las escritura, dice María Josefa, «comenzaron los problemas». Primero, la puerta de acceso al patio que lleva al portal tuvieron que «arrancarla» para poder pasar con la silla y después comprobaron la poca seguridad de los buzones, situados frente al ascensor y a baja altura. «Tiene que tener mucha precaución -señala María Josefa-, porque si sale de espaldas, como la silla no gira, tiene peligro de darse con ellos en la cabeza». Una vez en el piso, vieron que sólo las puertas y las luces reunían las condiciones y que ni el baño estaba preparado. Este detalle fue solventado con rapidez, ya que hablaron con el departamento y una técnico certificó que debían eliminar el pedestal para entrar en la ducha.

Con el problema de la terraza surgieron sus quebraderos de cabeza, primero porque gestionaron los permisos a nombre de la propietaria, en vez de la constructora, motivo por el cual ellas se veían obligadas a comprar el material para la reforma y Forcusa pondría la mano de obra. Por esta irregularidad decidieron acudir a un abogado para una reclamación, aunque fue denegada. Y dados los obstáculos burocráticos previos, optaron por trasladar su problema al Justicia, ya que con la pensión de poco más de 500 euros mensuales que recibe Teresa tampoco podrían permitirse una reforma de su propio bolsillo y seguir pagando la vivienda, obligación en la que le ayuda la hermana.

El Justicia se puso en contacto con Urbanismo, desde donde le confirmaron que la vivienda era de las adaptadas para discapacitados, que el interior debía estar habilitado de acuerdo a la normativa pero que las «terrazas privativas de una vivienda adaptada no están comprendidas en la superficie interior que debe ser adaptada por considerarse superficie exterior». Por ese motivo, consideraron desde la consejería que no veían adecuado seguir la sugerencia de esta institución, en la que solicitaban que se estudiara y analizara una «solución técnica» para rebajar el bordillo en la salida a las terrazas y que permitiera el uso de la misma y la salida y entrada con silla de ruedas.

«DEBERÍAN CONSTRUIR SEGÚN LAS NECESIDADES DE LAS PERSONAS»

Ahora la lucha de Teresa Moyano no es únicamente por ella, sino por otras personas minusválidas que podrían estar en semejante situación. «No es por mí -insiste-, sino por gente que puede llegar y encontrarse así» y para demandar que «deberían construir según las necesidades de las personas». Tal es el caso de un joven de Zaragoza, publicado el pasado año por la prensa de la capital aragonesa. Este minusválido, además de pequeñas deficiencias, demandó a la constructora de su vivienda la supresión de un escalón de unos 20 centímetros en las puertas que separaban el interior de la vivienda con la terraza, a la que no tenía acceso por sí solo. Logró que el departamento de Obras Públicas y Vivienda accediera a solventar las deficiencias, asumiendo el vacío legal en la normativa. Pero, finalmente, el propietario no aceptó la solución ya que le plantearon la sustitución de la carpintería por otra de mayor dimensión que se ajustase al pavimento, dejando algo de diferencia para garantiza la estanqueidad de la galería. Esta diferencia, un escalón de entre 4 y 5 centímetros, tampoco le permitía el acceso.

Sin embargo, la constructora no accedió en un principio a realizar las correcciones no previstas por la normativa de edificación. Desde Vivienda le pidieron una solución para que el joven pudiera utilizar su terraza, aunque la norma que regula la promoción de la accesibilidad y la supresión de las barreras arquitectónicas y urbanísticas no recogiera expresamente esta cuestión. Ésta define como barreras «aquellos obstáculos, trabas o impedimentos de carácter permanente o temporal, que limitan o dificultan la libertad de movimientos, el acceso, la estancia, la circulación y la comunicación sensorial de las personas que tienen limitada o disminuida, temporal o permanentemente, su movilidad o capacidad de relacionarse con el entorno». A su vez, especifica como barreras arquitectónicas en la edificación aquellas que se «encuentran situadas en el acceso o interior de edificios públicos y privados».

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El Justicia sugiere a la DGA rebajar un bordillo de una casa que debía estar adaptada a discapacitados

Diario digital de Radio Huesca, 19-06-2009

Fernando García Vicente, Justicia de Aragón, recibía la queja de una propietaria de una vivienda de protección oficial promovida por la DGA sobre el bordillo de acceso a las terrazas de una casa en la
calle Julio Alejandro Castro Cordes de Huesca. Ese bordillo es de 22 cm. de alto por 22 cm. de ancho por lo que no puede salir con la silla de ruedas. Como resolución de la queja el Justicia sugiere al
promotor de la vivienda, el Gobierno de Aragón, que rebaje ese bordillo para que se pueda entrar y salir a las terrazas con silla de ruedas.
Esta queja llegaba a la institución el pasado 27 de enero y solicitó información al Departamento de Obras Públicas, Urbanismo y Transportes del Gobierno de Aragón sobre la cuestión planteada. A fecha
de 20 de marzo no se había recibido la información por lo que se reiteró la petición y el 1 de abril se recibía una respuesta en la que se indicaba que esa vivienda adjudicada es de las adaptadas para
discapacitados con movilidad reducida y que se había presentado escrito denuncia sobre la vivienda citada.
Sobre el acceso a la terraza, decía el escrito, que según decreto del Gobierno de Aragón por el que se regula la Promoción de la Accesibilidad y Supresión de Barreras Arquitectónicas, Urbanísticas de
Transportes y de la Comunicación, la obligación de adaptación de la vivienda se dirige a la superficie útil interior de la misma, y no a la exterior, aún tratándose de elementos privativos de la finca.
El Justicia en su resolución decide sugerir a esa Administración como promotora del edificio de la vivienda adjudicada a un discapacitado que estudie y facilite una solución técnica que rebaje el bordillo en
la salida a las terrazas y que permita el uso de la misma y la salida y entrada con silla de ruedas.
También ha querido recordar al Departamento de Obras Públicas, Urbanismo y Transportes la obligación que impone la ley reguladora del Justicia de Aragón, de auxiliar al Justicia en la investigación de
las quejas que ante el mismo se presenten y de facilitar las informaciones que se soliciten para llevar a cabo adecuadamente la actuación investigadora.

Principio de la Historia

Hola a tod@s,

Hoy comienzo mi blog con una denuncia sobre la accesibilidad de las viviendas de Protección Oficial.

Hace un año que me adjudicaron una vivienda de VPO (Vivienda de Protección Oficial) para personas minusválidas con movilidad reducida (como es mi caso). Esta vivienda se suponía que tenía que estar adaptada, es decir, accesible para tener autonomía propia. El caso es que cuando entré a la vivienda me encontré que en la salida del salón a la terraza tenía un escalón de 22cm x 22cm de alto y ancho respectivamente, que con mi silla de ruedas es infranqueable.

De inmediato y visto el problema, me puse en contacto con la constructora y la respuesta es: “… La vivienda está construida según planos de G.A. (Gobierno de Aragón)…y que ellos no pueden hacer nada….”.

Posteriormente realizo un escrito al Departamento de Obras Públicas y Urbanismo del G.A., exponiéndole mi caso y la contestación es que: “…la Ley no contempla que las terrazas tengan que estar accesibles…”

Y por último, presento mi queja al Justicia de Aragón, que inmediatamente se pone en contacto conmigo y a través de esta Institución se dirigen también al Departamento de Obras Públicas y Urbanismo del G.A. y la contestación fue la siguiente: “… que era un espacio exterior privativo …”.

Una vez apurados todos los cauces administrativos que están de mi mano y que no he conseguido nada me pongo en contacto con los medios de comunicación de prensa y televisión, para hacer pública mi denuncia y en la que a través de este blog, podréis seguir en el apartado de Prensa.

No obstante, considero que existe un vacío legal en la normativa, ya que no se contempla que las terrazas de una vivienda de Protección Oficial adaptada no tienen que estar accesibles, cosa que en mi opinión no debería de ser así, ya que es parte de mi vivienda.

Y por cierto, quiero también exponer que entre medio de todos estos trámites y a través repetidos escritos presentados a la Inspección de Vivienda G.A., he conseguido que me terminen de adaptar el baño (duchas, grifos, eliminar el pedestal del lavabo, etc.), la puerta de acceso al portal (que no pasaba la silla por ser más estrecha que la silla y por lo tanto no podía ni acceder ni siquiera a mi portal) así como otros problemas que según la normativa (y así me lo reconoce la Inspección de Vivienda) tenían que estar hechos y no haber llegado a presentar estos escritos, que me están costado verdaderos quebraderos de cabeza.

Os seguiré informando como va todo a través de este blog